Los arcángeles son seres extraordinarios, extensiones del mismo Dios, que personifican su gracia, majestad y poder. Todos los arcángeles son sanadores. Vienen como maestros cirujanos para reparar nuestros cuerpos, así como reparan las vestiduras de nuestras almas. No hay campo de estudio en el que no sobresalgan. Con los Elohim ejercen el poder de crear o descrear la vida.
El título de “arcángel” se le dio a aquellos que se convirtieron en maestros de sus mundos “como arriba, así abajo” y el de “arcangelina” a sus complementos femeninos. Para ganar este oficio, muchos de los que ahora son arcángeles tuvieron que encarnar en forma humana, experimentando las mismas pruebas que los hijos e hijas de Dios. Sin embargo, hubo algunos que permanecieron en el mundo celestial y nunca encarnaron en la octava física.
El Morya nos instó con “Ahora digo, invoquen el ímpetu de los siete arcángeles para amplificar en su alma y en su deseo de ser completos los sentimientos de Dios que obligan a toda la conciencia a conformarse con la geometría de la individualidad. Los siete arcángeles ejercen el poder, la sabiduría y el amor del Infinito, de un cosmos aún por nacer dentro de ti a medida que las energías microcósmicas y macrocósmicas convergen para convertirse en la urdimbre y la trama de la fuerza de vida creativa. Ahora expande la copa de la conciencia para contener el arcángel de tu rayo.”
Bendiciones Diarias de los Arcángeles
El Morya también describió la oportunidad diaria que tenemos de conectarnos con los arcángeles. “Cada uno de los siete arcángeles lleva una esfera de las energías de Dios, una porción del rayo en el que sirve. Cada día en ritual sagrado, arrodillado ante el altar del Señor en el Gran Sol Central, recibe su esfera y es comisionado para ir por todo el cosmos a esparcir las semillas de luz Crística que brotan del rayo y la esfera del rayo que lleva dentro de su corazón como un gran disco solar de emergente identidad de Cristo.
“Y las llamas gemelas de los arcángeles y sus legiones que comprenden las huestes del Señor Cristo se inclinan también ante los hijos e hijas de Dios, reconociendo el fuego sagrado sobre el altar del corazón
. Cada día, los hijos e hijas de Dios que evolucionan en Mater tienen la oportunidad de recibir las energías de uno de los siete rayos que circulan desde la esfera de luz sostenida en el corazón de un arcángel”.
Arcángeles
Nuestros maestros, tutores y amigos
Los arcángeles son seres extraordinarios, extensiones del mismo Dios, que personifican su gracia, majestad y poder. Todos los arcángeles son sanadores. Vienen como maestros cirujanos para reparar nuestros cuerpos, así como reparan las vestiduras de nuestras almas. No hay campo de estudio en el que no sobresalgan. Con los Elohim ejercen el poder de crear o descrear la vida.
El título de “arcángel” se le dio a aquellos que se convirtieron en maestros de sus mundos “como arriba, así abajo” y el de “arcangelina” a sus complementos femeninos. Para ganar este oficio, muchos de los que ahora son arcángeles tuvieron que encarnar en forma humana, experimentando las mismas pruebas que los hijos e hijas de Dios. Sin embargo, hubo algunos que permanecieron en el mundo celestial y nunca encarnaron en la octava física.
El Morya nos instó con “Ahora digo, invoquen el ímpetu de los siete arcángeles para amplificar en su alma y en su deseo de ser completos los sentimientos de Dios que obligan a toda la conciencia a conformarse con la geometría de la individualidad. Los siete arcángeles ejercen el poder, la sabiduría y el amor del Infinito, de un cosmos aún por nacer dentro de ti a medida que las energías microcósmicas y macrocósmicas convergen para convertirse en la urdimbre y la trama de la fuerza de vida creativa. Ahora expande la copa de la conciencia para contener el arcángel de tu rayo.”
¿Quiénes son los Siete Arcángeles?
Arcángel Miguel y la Fe
El Arcángel Miguel es el Príncipe de los Arcángeles y de las Huestes Angélicas, y el Ángel de la Liberación. Él dirige a los ángeles de la guarda de la protección. Su complemento divino es la arcangelina Fé.
Arcángel Jofiel y Cristina
Arcángel Jophiel y Christine son el arcángel y arcangelina (arcángel femenino) del segundo rayo de sabiduría e iluminación. Estas llamas gemelas amplifican la conciencia Crística dentro de los ángeles, elementales y hombres.
Arcángel Chamuel y la Caridad
El arcángel Chamuel y su complemento divino, La Arcangelina Caridad, sirven en el tercer rayo del amor divino. Junto con sus legiones de ángeles del amor, trabajan para expandir la llama de la adoración y el amor divino dentro de los corazones de los hombres y los elementales.
Arcángel Gabriel y Esperanza
El Arcángel Gabriel y la Arcangelina Esperanza son arcángeles del cuarto rayo de pureza y de la llama de la ascensión. Junto con los serafines, sus ángeles custodian el concepto inmaculado del diseño de Dios para todos y refuerzan la llama de la esperanza en todo el mundo.
Arcángel Rafael y Madre María
El arcángel Rafael es el arcángel del quinto rayo de la verdad, la totalidad, la curación, la ciencia, la precipitación, la vida abundante, la música y las matemáticas. Su complemento divino es la Madre María, la madre de Jesús, que se ha aparecido a muchos en todo el mundo.
Arcángel Uriel y Aurora
El Arcángel Uriel y Aurora son los arcángeles del sexto rayo de ministración, servicio y paz. En sus ministraciones, trabajan en estrecha colaboración con Jesucristo para traer la llama de la paz.
Arcángel Zadkiel y Santa Amatista
Arcángel Zadkiel y Santa Amatista son los arcángeles del rayo violeta. Junto con los ángeles de llama violeta, refuerzan las cualidades de la libertad, la alquimia, la transmutación, el perdón y la justicia de Dios.
Madre María
Ella es la arcangelina del rayo esmeralda de sanación, integridad, verdad, ciencia y abundancia. La Madre María es una de las más grandes maestras de la humanidad. Ella nos instruye en la ciencia del concepto inmaculado y en cómo seguir los pasos de Jesús.